El hecho se registró en Santiago del Estero cuando una joven de 32 años
volvía de bailar con su pareja. Su cuñado las interceptó y la acusó de dar
"un mal ejemplo". Le lanzó ladrillos.
Una mujer, que regresaba de un local
bailable con su novia, vivió ayer dramáticos momentos al ser interceptada por
su cuñado, quien la insultó y le propinó un ladrillazo en el rostro por
ser lesbiana.
El violento hecho sucedió ayer por la
mañana en el barrio Mariano Moreno.
La víctima, de 32 años, regresaba a su domicilio con la mujer con quien
mantiene una relación sentimental.
Antes de arribar a su casa, las chicas fueron interceptadas por un vecino,
quien además es cuñado de una de las integrantes de la pareja. El hombre
la habría acusado de dar “un mal ejemplo” a sus hijas y a toda la gente del
barrio, por lo que se inició una discusión.
El enfrentamiento verbal fue subiendo de tono, hasta que el hombre tomó un ladrillo
y se lo arrojó a las mujeres, según señalo la víctima a la Policía. El ladrillo
impactó de lleno en el rostro de la víctima, provocándole varios cortes en la
cara y la pérdida de algunas piezas dentarias.
Auxilio médico
La mujer comenzó a perder sangre, por lo que los vecinos decidieron
solicitar ayuda médica. Una ambulancia la trasladó al hospital Regional “Ramón
Carrillo”, donde los médicos comprobaron que la paciente presentaba profundas
heridas cortantes en los labios, había perdido dos piezas dentarias y había
sufrido daños en la mandíbula.
El día 21 de junio de 2014, el Monseñor Héctor Aguer, arzobispo de la localidad de La Plata hizo una interrupción durante la misa del sábado pasado en la Catedral, para realizar un “acto de desagravio por la profanación del templo”, en referencia a un video que grabaron “La Tigresa del Oriente” junto a “Pocha” Leiva, dentro del edificio religioso. Aguer clasificó lo sucedido como una “blasfemia” y condenó a la homosexualidad en general.
“Según he oído decir, la filmación estaba destinada a un boliche gay de la Ciudad. Ahora resultan normales esas abominaciones amparadas por las leyes”, dijo Monseñor Aguer frente a los fieles, según informa la Agencia Informativa Católica Argentina.
Las expresiones del Arzobispo de La Plata expresan la línea más conservadora de la Iglesia Católica.
“Ofrezcamos el santo sacrificio de la misa en reparación y desagravio por la profanación del templo, y por las blasfemias proferidas. Dediquemos al Señor la procesión de la que hemos participado, como gesto de amor y de entrega confiada, incondicional. Recemos mucho, también, por esas personas descaminadas, depravadas, para que Jesús les toque el corazón y las convierta; todo es posible para su omnipotencia y su misericordia”, concluyó el arzobispo.
“No es la primera vez que Aguerhace este
tipo de declaraciones. Es parte del ala más reaccionaria y conservadora de la
Iglesia. En esta oportunidad se excedió por el nivel de violencia y
discriminación. El no habla mal del video, se refiere a toda la comunidad”,
indicó César Cigliutti, presidente de la Comunidad Homosexual
Argentina (CHA).
El presidente de la Federación Argentina
de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans (FALGBT), Esteban Paulón, aseguró que “hace mucho tiempo que no se escuchan frases tan violentas en el
país. Informó que evaluará las acciones legales que realizará y exigió al Vaticano una sanción ejemplificadora al arzobispo de La Plata. “Es un insulto al colectivo y un menosprecio a las leyes democráticas, que fueron apoyadas por el propio pueblo católico”, sostuvo Paulón.
El Instituto Nacional contra la
Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI) consideró “desafortunadas y
discriminatorias” las palabras de Aguer, por lo que instruyó un procedimiento
de oficio. “Consideramos que las expresiones de monseñor Héctor Aguer
manifiestan una visión punitiva y estigmatizante de las sexualidades no
hegemónicas que nada tiene que ver con la construcción de una sociedad donde la
diversidad, la inclusión y la igualdad han sido abrazadas por la mayoría de los
argentinos y argentinas”, expresó el organismo.
Desde el Inadi recordaron, además, que “no
es la primera vez que monseñor Aguer tiene manifestaciones hostiles y
discriminatorias para con el colectivo LGBT, ya que durante el tratamiento de
las leyes de matrimonio igualitario y de identidad de género también fue
llamado a la reflexión por este organismo”.
“Si se sintieron agravados por la filmación dentro de la Iglesia, podrían haber hecho una denuncia a la artista o a la productora. Desconozco si hubo o no autorización para hacerlo. Nosotros promovemos el respeto por los espacios de fe porque cada uno tiene sus creencias y es válido. Además, uno puede ser gay o lesbiana y profesar una religión”, explicó.